30 de julio de 2013

Alubias Verdinas asturianas con Almejas


Alubias Verdinas asturianas con Almejas


 


Las verdinas son un tipo de alubia más pequeña que la típica que se usa para fabada, son pequeñas y con un color verde claro característico. Se suelen cocinar con marisco, es un tipo de alubia que le va bien el marisco, entiendo que será porque es una alubia más suave que la típica de la granja, pero los entendidos en esto de las fabas asturianas que se pronuncien.

Ingredientes:

100 gr. de verdinas por persona (puestas la noche anterior a remojar en agua)
2 hojas de laurel
1 cebolla o 2 cebolletas como más os guste
2 dientes de ajo
1 vasito de vino blanco
1 manojo de perejil
1/2 kilo de unas buenas almejas
aceite


1º   Poner a hervir las alubias con el laurel y un buen chorreo de aceite, cortar un par de veces la cocción con agua fría, esperar a que estén tiernas y colarlas y guarda el agua de cocción y reservarlas.


2º   En un recipiente amplio con aceite, le ponemos la cebolla cortada muy menuda con los ajos cortados muy pequeños y los sofreímos, después de esto le incorporamos el perejil bien picado y le damos unas vueltas con la cebolla y le incorporamos el vasito de vino y dejamos un momento para que se evapore el alcohol y entonces le ponemos las almejas y dejamos que se abran.


3º   Entonces le incorporamos las alubias que tendremos reservadas en el colador y le incorporamos el agua de la cocción solo hasta cubrirlas no más, y lo dejamos así unos 15 minutos al fuego, y durante este tiempo le vamos dando el vaivén a la olla para trabar la salsa y dejarlo espeso y con este aspecto, y no muchos más.
 
 


20 de julio de 2013

El sujetador que se quita dando palmas


El sujetador que se quita dando palmas

 

 


Los inexpertos dedos de los hombres a la hora de quitar sujetadores tienen un aliado fiel en el “Clap-Off Bra”, el primer sujetador que se quita entre aplausos y que hace realidad uno de los sueños más recurrentes de todo califa. Es obra del ingeniero norteamericano Randy Sárafan, un genio de la electrónica y admirador ferviente de las pizpiretas mujeres árabes.
Según sus palabras, le vino la inspiración del sujetador con cierre-aplauso después de leer un artículo en la BBC sobre la ropa interior electrónica que hacía furor en el mundo árabe, especialmente en Siria, donde las mujeres se ponen bragas musicales o sujetadores que se abren por control remoto.
En Occidente, a menudo pensamos en las culturas árabes como sociedades sexualmente reprimidas, cuando algunas veces resulta que van claramente por delante de nosotros en avances de ropa interior. Según Randy, las culturas occidentales tienen una o dos cosas que aprender de los sirios sobre la lencería electrónica. Y de ahora en adelante, su guerra santa será intentar introducir este artilugio para goce y disfrute de todo el mundo.

Así que dos años y muchos prototipos después (alguno de los cuales llegó a incendiarse) Randy Sárafan se llenó de orgullo y satisfacción al presentar su ”Clap-Off Bra” en Kickstarter, para intentar comercializar masivamente su invención con la ayuda de desinteresados mecenas. Sólo consiguió unos nimios 395 $, pero esta es la historia de su gran cruzada.

El primer paso en esta misión consistió en replicar algunos de los avances íntimos que causaban furor en Siria allá por 2011. El artículo de la ropa interior mencionaba un sostén que se abría por control remoto con un aplauso. De inmediato decidió hacer su propio sostén (sin flecos) como un trampolín hacia la innovación en la ropa interior occidental. 
Pero no fue fácil. Lo primero que hizo fue buscar en Internet por si existiera algún diseño sirio de los circuitos. No había nada; la Red estaba oscura como un velo negro. Así que decidió empezar desde cero.

Primero probó con un solenoide, pero se calentó mucho y decidió enterrar la solución electromagnética por posibles peligros de quemadura. Luego se tiro un poco por la vena mecánica, construyendo un sistema de liberación rápida con un pequeño muelle. También terminó en un desastre. También probó un mecanismo de explosión, un hilo que se quemaba y hasta una rara tecnología de pestillo electrónico en el canalillo.

Ante los fracasos, Randy Sárafan pensó en consultar en una gurú de la “ropa ridícula” como Rachel McConnell, una chica que vive para desarrollar aplicaciones Java y customizar ropa estrafalaria desde las páginas de Instructables.
Al hablar con Rachel sobre su larga lista de fracasos, la chica le sugirió una idea: básicamente, el uso de un electroimán y un pequeño imán de tierras raras para jugar con la polarización de ambos, de tal manera que se repelieran a demanda.

Este electroimán, junto con un pasador, una batería de 9V y una placa Arduino para controlar la palmada obraron el milagro. Y como Randy es un profeta en tierra extraña, quiere donar su invención a los hombres, para su disfrute; en la página de Instructables puedes conseguir todos los detalles de su construcción, así como el código del programa para el Arduino, para incorporarlo a cualquier sostén.

Una vez fabricado el sistema de apertura, basta con coserlo y ocultar el circuito, como por ejemplo con un discreto lazo rosa gigante. El resto ya es solamente aplaudir.

15 de julio de 2013

El miedo ha hecho de nosotros unos esclavos


El miedo ha hecho de nosotros unos
 
esclavos
 
 

El miedo ha hecho de nosotros unos esclavos y ese mismo miedo nos mantiene en esa condición.  Nos inclinamos ante los políticos como si fueran los amos del mundo; aceptamos esta vida de humillaciones y de miseria, solamente por temor. Miedo a los cambios, miedo a perder lo poco que tienes, miedo al miedo.
Nosotros los ciudadanos de a pie, a pesar que somos mucho más numerosos, nos doblegamos frente a la minoría que nos gobierna. La fuerza de los políticos no la obtienen de su policía sino de nuestro consentimiento. Justificamos nuestro miedo, nuestra cobardía al enfrentamiento legítimo contra las fuerzas que nos oprimen con un discurso lleno de humanismo moralizador. Nosotros rechazamos la violencia porque nuestros padres, nuestros profesores y nuestra moral nos dicen que no hay que recurrir a la violencia para solucionar los problemas, estamos anclados en los espíritus de aquellos que se oponen al sistema defendiendo unos valores que el mismo sistema nos ha enseñado.
Pero los políticos cuando se trata de conservar su hegemonía, de conservar el poder, de conservar sus privilegios  no vacilan nunca en utilizar la violencia de la forma que sea y como sea. Sin embargo, entre nosotros existen algunos individuos que escapan al control de las conciencias, pero todos estos están bajo vigilancia. Todo acto de rebelión o de resistencia es asimilado como una actividad desviada o terrorista.
Ahora bien, como ciudadanos modernos estamos convencidos de que no existe alternativa a la organización política actual, hemos tirado la toalla, ya nos conformamos con lo que tenemos, y el que tiene algo solo piensa en que no se lo quiten, se acabó la lucha.
Los políticos han convencido a la clase dominada que adaptarse a su ideología es lo mejor, equivale a adaptarse al mundo tal como es y tal como ha sido siempre. Soñar con otro mundo se ha convertido en un crimen condenado al unísono por los medios y por todos los poderes.
La clase política a través del deporte mediático, nos representan el éxito y el fracaso, el esfuerzo y  las victorias que el ciudadano moderno ha dejado de vivir en carne propia. Su insatisfacción lo incita a vivir por encargo frente a su aparato de televisión. Mientras que los emperadores de la Antigua Roma compraban la sumisión del pueblo con pan y circo, hoy en día, es con divertimientos y consumo del vacío que se compra el silencio de los ciudadanos.
 
No obstante, los ciudadanos. Creen votar y decidir libremente quién conducirá sus asuntos, como si aún pudieran elegir. Pero, cuando se trata de escoger la sociedad en la que queremos vivir, ¿creen ustedes que existe una diferencia fundamental, entre la socialdemocracia y la derecha populista  en España, entre demócratas y republicanos y entre laboristas y conservadores? No existe ninguna oposición, puesto que los partidos políticos dominantes están de acuerdo en lo esencial: la conservación de la presente sociedad mercantil. Ninguno de los partidos políticos que pueden acceder al poder pone en entre dicho el dogma del mercado. Y son esos mismos partidos los que, con la complicidad mediática, acaparan las pantallas; riñen por pequeños detalles con la esperanza de que todo siga igual; se disputan por saber quién ocupara los puestos que les ofrece el parlamentarismo mercantil. Esas pobres querellas son difundidas por todos los medios de comunicación con el fin de ocultar un verdadero debate sobre la elección de la sociedad en la que queremos vivir. La apariencia y la futilidad dominan sobre el profundo enfrentamiento de ideas. Todo esto no se parece en nada, ni de lejos, a una democracia.
La democracia real se define en primer lugar y ante todo por la participación masiva de los ciudadanos en la gestión de los asuntos de la ciudad. Es directa y participativa. Encuentra su expresión más auténtica en la asamblea popular y en el dialogo permanente sobre la organización de la vida en común. La forma representativa y parlamentaria que usurpa el nombre de democracia limita el poder de los ciudadanos al simple derecho de votar; es decir, a nada. Escoger entre gris claro y gris oscuro no es una elección verdadera.  Las sillas parlamentarias son ocupadas en su inmensa mayoría por la clase económicamente dominante, ya sea de derecha o de la pretendía izquierda.
No hay que conquistar el poder, hay que destruirlo. Es tiránico por naturaleza, sea ejercido por un rey, un dictador o un presidente electo. La única diferencia en el caso de la “democracia” parlamentaria es que los ciudadanos tienen la ilusión de elegir ellos mismos al amo que deberán servir. El voto nos ha hecho cómplices de la tiranía que los oprime.
Los ciudadanos  no somos esclavos porque existen amos, sino que los amos existen porque nosotros los hemos elegido para que siguieran siendo nuestros amos.
 
JClemente
 

 

 

7 de julio de 2013

¡DIOS LOS CRÍA Y ELLOS SE JUNTAN!


¡DIOS LOS CRÍA Y ELLOS SE JUNTAN!

 
Refrán español, que alude con cierta ironía a la inclinación natural que lleva a juntarse a los de un mismo genio y temperamento. Se aplica más bien a personas de conducta censurable.
Yo más bien diría:¡Dios los cría y el Diablo los junta!

El pacto PP - PSOE fue amañado en la sombra entre
 
Mariano Rajoy y Felipe González para contrarrestar
 
la sangría de 10 millones de votos.
 
 
Mariano Rajoy y Felipe González se reunieron el 21 de mayo en la Moncloa para amañar el último gran pacto entre PP y PSOE. La cita no fue pública, pero ha sido confirmada por ambas partes. A partir de ahora, socialistas y populares ya no esconderán tanto su sintonía y buscarán puntos de encuentro, zonas de opacidad que les beneficien y pactarán “oasis” de críticas políticas para ir tejiendo el gran acuerdo “derecha-izquierda” que ya se ha hecho en Italia o Grecia para dejar fuera del poder a los partidos emergentes, como el Movimiento 5 Estrellas del italiano Beppe Grillo o la Syriza griega.
Las dos formaciones más importantes de la partitocracia española están preocupadas porque las últimas encuestas son demoledoras: 20 de los 36 millones de españoles que pueden votar anuncian su abstención, lo que significa que 10,1 millones de españoles han abandonado ya al PP y al PSOE en esta legislatura. La catástrofe es de tal magnitud, que para salvar el euro y los privilegios del actual régimen de partidos, ambas formaciones deben unirse frente a la abstención y a los partidos pequeños que prevén entrar masivamente en el Parlamento, toda vez que la oposición de los movimientos sociales está demostrando una absoluta incapacidad para articularse en España. La debacle afecta también a CiU y algo menos a PNV y Coalición Canaria, partidos que también han servido de “muleta” a las dos grandes formaciones que han provocado esta catástrofe laboral y económica. Por su parte, IU y UPyD están satisfechas porque recogen una pequeña parte del desgaste de PP y PSOE, el suficiente para poder pactar con ellos e introducir “savia fresca” en el régimen de partidos. Como profetizó un conocido general español, “todo está atado y bien atado”.